Redacción/Puro Beisbol

¿Cuál ha sido el mejor duelo de pitcheo en la historia del beisbol?

Ocurrió el 2 de julio de 1963 en el Candlestick Park de San Francisco, cuando chocaron el gran veterano Warren Spahn contra el entonces joven dominicano Juan Marichal (ambos llegarían posteriormente al Salón de la Fama de Cooperstown).

Los dos sostuvieron un duelo 0-0 en 15 episodios y Marichal le pidió a su manager que no lo sacara del juego, mientras estuviera lanzando «ese hombre (Spahn) porque él tiene 42 años y yo apenas 25».

Era como una pelea de box, donde ninguno de los dos cesaba y en los primeros 15 innings jamás voltearon al dugout con su manager, como sucede ahora con los pitchers que en la quinta entrada ya sienten que hicieron su trabajo.

Marichal salió filoso en el episodio 16 y retiró a los Bravos de Milwaukee en cuatro bateadores, incluyendo un elevado al central de Hank Aaron (esa noche bateó de 7-0 con un ponche).

Spahn, uno de los mejores abridores zurdos de la historia y quién ese año finalizó con 23-7 y 2.60 de ERA, solo había dado una base al llegar al cierre del capítulo 16.

Pero después de sacar un out y justamente ya con 200 pitcheos, se le apareció el gran Willie Mays y al primer lanzamiento –un screwball– descargó un cuadrangular por todo el izquierdo para dejarlos tendidos en el terreno, mientras Juan Marichal corría al terreno para abrazarlo en medio del festejo de los fanáticos.

«No sabía que había pegado un maldito jonrón», dijo Mays en su libro. “No lo estaba intentando. Conecté un jonrón y (Juan) Marichal es el primero en abrazarme”.

De ese memorable juego se están cumpliendo justamente 60 años y me atrevo a decir que jamás volveremos a ver un duelo de pitcheo de este calibre.

Marichal y Spahn se hicieron después muy buenos amigos hasta que Warren falleció en el año 2003.