WEST PALM BEACH, Florida (AP)– Los Astros de Houston se han quedado sin ocho lanzadores a consecuencia del protocolo de COVID-19. Pero el gerente general James Click negó que haya planes de hacer una pausa en la actividad dentro del campamento de pretemporada.
El manager Dusty Baker comentó el viernes que los lanzadores dominicanos Cristian Javier, Pedro Báez, Francis Martes, Enoli Paredes estaban fuera, así como el mexicano Héctor Velázquez.
El jueves, Baker informó que los dominicanos Bryan Abreu y Ronel Blanco, así como el venezolano Luis García, debieron abandonar el complejo, también por los protocolos de salubridad.
Se desconocía si los ocho lanzadores habían dado positivo de coronavirus o estuvieron en contacto cercano con alguien que se infectó. No hay una fecha definida para su retorno, pero deben guardar cuarentena al menos durante una semana, de acuerdo con las reglas de sanidad de las Grandes Ligas.
A comienzos de esta semana, los Astros perdieron al abridor dominicano Framber Valdez, quien se fracturó un dedo de la mano izquierda mientras fildeaba en un juego de pretemporada.
Pese a todo, los Astros no están en riesgo de quedarse sin pitchers. Incluyeron a 23 en su nómina de 40 peloteros, más 16 que asistieron al campamento como invitados sin ser parte de ese grupo.
El mexicano José Urquidy abrió el juego del viernes y lanzó dos innings ante Miami.
Click negó que hubiera preocupación en el equipo por la posibilidad de cerrar el campamento.
“No, no estamos preocupados por eso”, comentó a medios de Houston.
Añadió que los protocolos están diseñados para aislar los casos potenciales, a fin de que la situación no llegue a un grado tal en que se contemple una pausa o un cierre.
En cuanto a los planes de pitcheo para la próxima semana, Baker dijo: “Habrá que ajustar una y otra vez”.
“Simplemente hay que encontrar una forma de resolver esto y una solución. Nos faltan ahora algunos brazos. Estamos preocupados, pero afortunadamente tenemos más pitchers”, indicó.
