Recordando a uno de los equipos más poderosos para una Liga semi profesional en la historia del beisbol mexicano
Por Fernando Ballesteros
Durante la temporada 1998 de la Liga del Istmo en Oaxaca, los ‘cementeros’ de El Cruz Azul fueron campeones bajo el mando de El Diablo Montoya al vencer en la final a El Espinal con todo y su pitcher estelar, el legendario Jesús ‘Chito’ Ríos.
En el roster monarca figuraban Matías Carrillo, Narciso Elvira, Gerónimo Gil, Pancho Campos, Sixto Báez y Adán Muñoz –por citar algunos profesionales–, de los cuales los tres primeros jugaron en Grandes Ligas.
Dicho equipo jugaba en Lagunas, Oaxaca, donde el estadio se abarrotaba todos los fines de semana al igual que todos los parques que visitaba ese trabuco.
La Liga del Istmo llegó a ser una de las más fuertes de nivel semi profesional –en todo México–, entre la década de los 90’s y principios de este siglo.
Sin embargo, la precaria situación económica de la región provocó que el circuito se viniera abajo y recientemente lo reactivaron con el apoyo del empresario, Alfredo Harp Helú.