La historia en México de la célebre pareja
Por Fernando Ballesteros
Corrria el año de 1953 –ya con dos temporadas retirado del beisbol–, cuando el legendario Joe DiMaggio llegó acompañado de la célebre Marilyn Monroe a Puerto Peñasco, Sonora, para la época un campo pesquero.
Dimaggio y Monroe aparecen abrazados en la vía del tren justo en el muelle, ambos en compañía del hermosillense y famoso ampayer, Carlos Alberto González.
¿Como llegaron a Sonora el ícono jugador de los Yankees y la famosa actriz de Hollywood?
De acuerdo a las crónicas de la época, se cree que González y Dimaggio se conocían muy bien por la estancia del sonorense en Estados Unidos entre 1946 y 1950, cuando se especializó como umpire para luego hacer una larga carrera que le valió llegar al Salón de la Fama del Beisbol Mexicano, ubicado en Monterrey.
DiMaggio y Monroe se dieron una escapada a Puerto Peñasco, lejos de los reflectores de la prensa que los buscaban por ser la pareja de novios más famosa del mundo.
Meses después de su estancia en Sonora, Joe y Marilyn se casaron en San Francisco en una boda privada con invitados especiales, aunque el matrimonio duró solo nueve meses por un supuesto maltrato psicológico del pelotero (celos obsesivos), según revelaciones de la llamada ‘Sex Symbol’.
DiMaggio jugó 13 años en MLB y ganó nueve anillos de Serie Mundial, así como tres premios al Jugador Más Valioso.

Se casó con Marilyn en 1954, el año cuando el veracruzano Beto Ávila ganó el título de bateo de la Liga Americana con los Indios de Cleveland.
Y dentro de unos meses se cumplirán 70 años de la visita de Joe y Marilyn a Puerto Peñasco, cuando se jugaba la Liga de la Costa del Pacífico en el invierno mexicano, aunque todavía no aparecía el equipo local Tiburones para participar en la Liga Norte de México.